La ventaja principal de los préstamos con ASNEF es que permiten acceder a financiación a la que teóricamente no tendríamos acceso si acudiésemos sólo a los bancos o a las administraciones públicas.
Un banco nunca dará financiación a un solicitante si este tiene una deuda no pagada en ASNEF, lo que significa que ante necesidades urgentes de capital, un préstamo con ASNEF a través de prestamistas particulares es la única opción posible.
Además, en la mayoría de los casos los préstamos con ASNEF tienen las siguientes ventajas:
- Toda la operativa anterior a la firma del préstamo en notaria se realiza online . El cliente se pone en contacto a través del formulario correspondiente en la web y todo el envío de documentación así como el estudio del préstamo se realiza a distancia sin necesidad de desplazarse.
- Puedes firmar en tu notaria de confianza con total transparencia; la que tengas más cerca de casa o la que simplemente tu elijas.
- No se necesita justificar la razón para solicitar el préstamo. Cuando acudimos a un banco a solicitar un préstamo debemos justificar para qué necesitamos el dinero. Si accedemos a financiación a través de un préstamo con ASNEF no será necesario justificar la razón de nuestra solicitud, lo que significa que podremos utilizar nuestro préstamo con ASNEF para reformar nuestra casa, pagar deudas que no se han llevado a ASNEF, reunificar deudas o capitalizar nuestro negocio.
- No se exigen productos vinculados para la contratación del préstamo. Aunque podemos acceder a un préstamo hipotecario a través de una entidad bancaria sin tener que contratar nada más que el seguro de vivienda, en la mayoría de ocasiones nos presionarán ofreciéndonos unas mejores condiciones de devolución si contratamos seguros de salud, pólizas de seguro para vehículos, planes de jubilación… A través de los prestamistas particulares el único producto vinculado que se exige (porque lo permite la ley) es el seguro de protección del inmueble, pensado para que el prestamista no pierda su dinero en el caso de que el prestatario incurra en impago del préstamo y además el inmueble sufra daños (incendio, tormenta…).
- No hace falta adelantar dinero. No existen comisiones de apertura ni gastos que se deban adelantar para poder firmar el préstamo. El único gasto al que tiene que hacer frente el solicitante es el gasto de tasación de la vivienda o inmueble que quiere usar para avalar la operación, pero también podemos adelantar ese gasto y prorratearlo dentro de las cuotas del préstamo en sí.
- No respondemos con todo nuestro patrimonio personal. Cuando solicitamos un préstamo personal a través de una entidad bancaria respondemos con todo nuestro capital presente y futuro, así que en el caso de impago la entidad bancaria podrá disponer de nuestro salario (embargando parte del mismo a través de una resolución judicial) o de nuestros bienes muebles e inmuebles para que devolvamos la deuda. A través de un préstamo hipotecario mediante prestamistas particulares solo responderemos por el inmueble que hayamos utilizado para avalar la operación.
- No hay comisión por cancelación anticipada ni total ni parcial.
- El tipo de interés es mucho menor que en los microcréditos rápidos. La TAE de un préstamo hipotecario con ASNEF suele rondar aproximadamente el 13-14 %, a diferencia de los microcréditos rápidos, que suelen exigir intereses de devolución del 70%, 100%, 150 % o incluso más.
Beneficios
Los beneficios principales de los préstamos con ASNEF son varios, entre los que se podrían destacar:
- La rapidez de respuesta de los prestamistas particulares
- La posibilidad de acceso a financiación incluso aunque estemos ya devolviendo otras deudas
- La rapidez de los trámites, que se realizan todos de forma telemática.
En general a través de los préstamos con ASNEF podremos acceder a financiación y préstamos a los que mediante otras vías no sería posible acceder. Además podemos obtenerlos de forma mucho más rápida y cómoda.