Disolver una Sociedad Limitada no es una decisión que se tome a la ligera, puesto que generalmente viene motivada por razones poco favorables, como relaciones insostenibles entre los socios o falta de recursos económicos. Por eso muchas de ellas continúan teniendo deudas en el momento de expirar, pero, ¿se puede disolver una Sociedad Limitada con deudas?

Como sabemos que hay dudas sobre este tema tan complejo, desde Préstamos con Asnef hemos decidido resolverlas todas en este artículo. 

¡Sigue leyendo y descubre cómo disolver tu Sociedad Limitada con deudas!

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Pasos para disolver una Sociedad Limitada

Disolver una Sociedad Limitada no implica solamente cerrar el negocio como tal, sino que hay que llevar a cabo una serie de procesos de liquidación y disolución un tanto complejos. 

En primer lugar, hay que cesar oficialmente la actividad de la empresa, entregando el modelo 036 en la Agencia Tributaria. Este sería el primer paso para dejar el negocio inactivo y lo cierto es que muchos empresarios deciden terminar el proceso en este punto para no tener que enfrentarse a más trámites, pero para disolver la sociedad habría que continuar con los siguientes pasos: 

  1. Disolver la Sociedad Limitada

Aunque hay muchos motivos para cesar una actividad comercial, no hay tantos para disolver una Sociedad Limitada, y las causas que hay están claramente especificadas en el artículo 363 de la Ley de Sociedades de Capital. Son las siguientes:

  • Cese de la actividad o actividades del objeto social
  • Cuando no se pueda conseguir el fin social
  • Si se paralizan los órganos sociales de la sociedad
  • Cuando concluya la empresa que constituye el objeto de la sociedad
  • Cuando el negocio tenga pérdidas que provocan que el patrimonio neto de la sociedad esté por debajo de la mitad del capital social
  • Cuando el capital social esté por debajo del mínimo legal establecido
  • Cuando el valor de las participaciones sociales o acciones sin voto excedan la mitad del capital social

Para disolver una sociedad, además de darse alguna de estas causas, se debe llegar a un acuerdo en la Junta General de socios, puesto que son los que constatan la confirmación de la causa y la aceptación de la disolución. 

En este punto del proceso, se debe enviar el acuerdo de la Junta al Registro Mercantil para que quede constancia de él. Inscribirlo como escritura pública tiene un coste de alrededor de 200 euros. 

  1. Liquidar la Sociedad Limitada

Si la empresa no tiene deudas ni ningún tipo de pago pendiente (IVA, IRPF, tasas de la Seguridad Social, pagos a proveedores o acreedores, etc.), la liquidación se podrá realizar a la vez que la disolución. 

Si se tienen deudas, antes de cerrar la empresa es necesario vender todo lo que se tiene para pagar todo el dinero que se deba. 

En esta etapa, los administradores se convierten en liquidadores, a menos que los estatutos, la junta o un tribunal designen a otros. Los liquidadores se aseguran de que el proceso se realice de manera justa y que se pague a todos los acreedores antes de repartir el dinero restante entre los socios de acuerdo a sus inversiones en la empresa.

Después de pagar las deudas, el dinero restante se divide entre los socios según lo que hayan invertido, y esto se detalla en un Balance de Liquidación Final que debe ser aprobado por la Junta General.

  1. Extinción de la Sociedad Limitada

Para formalizar la extinción de una Sociedad Limitada, habría que protocolizar ante notario:

  • La constatación de que el Balance de Liquidación Final ha sido aceptado por todas las partes y el plazo para cuestionarlo ha terminado.
  • La constatación de que se han liquidado todas las deudas o de que se tiene dinero para hacerlo más adelante. 
  • La constatación de que cada socio ha recibido su parte de la liquidación.

¿Se puede liquidar una sociedad con deudas?

¡Sí! Ya hemos comentado que, en caso de tener deudas, habría que liquidarlas antes de proceder a la liquidación de la compañía. Pero, realmente, hay dos formas de liquidar una Sociedad Limitada con deudas.

  1. Concurso de acreedores

Generalmente, lo que se hace es solicitar a un juez un concurso de acreedores de forma voluntaria, es decir, convertir los bienes de la empresa en dinero para pagar a los acreedores. Entonces, se lleva a cabo un plan de liquidación con el objetivo de vender los activos de la empresa para pagar a los acreedores.

Dicho plan debe aprobarse por el juez y los acreedores y representantes de los trabajadores tendrán 15 días para modificarlo. Pasado este plazo, el plan se pone en marcha y se empiezan a vender los activos. Con la intención de maximizar la transparencia del proceso, los acreedores entregan cada tres meses un informe especificando las operaciones que se han realizado y la lista de créditos pendientes. 

  1. Concurso express

Para aquellas empresas que no tienen activos que vender para hacer frente a sus deudas, existe otra opción llamada concurso express. Este tipo de concurso sirve especialmente para pequeñas y medianas empresas que quieren cerrar su negocio. 

No obstante, para acceder a esta opción es necesario cumplir una serie de requisitos específicos. En concreto, los siguientes:

  • Que no sea posible rescatar activos que hayan salido del patrimonio de la sociedad en los dos años anteriores a la declaración del concurso.
  • Que los administradores de la empresa no hayan agravado con sus actos la insolvencia de la empresa.

Las empresas que cumplan estas características podrán liquidar su Sociedad Limitada mediante concurso express si el juez dictamina que su caso es demasiado crítico como para hacer un procedimiento concursal regular. 

Como ves, disolver una sociedad limitada con deudas o sin ella es un procedimiento bastante complejo para el que suele hacer falta la ayuda de una consultoría especializada en estos temas, así que lo mejor es siempre evitarlo. 

¿Cómo evitar disolver una Sociedad Limitada con deudas?

Si tu empresa tiene deudas y estás planteándote liquidar tu Sociedad Limitada por ello, te recomendamos solicitar un préstamo de capital privado. En Préstamos con Asnef entregamos dinero rápido a personas o empresas que se encuentren en una situación de deuda para que puedan resolver sus problemas financieros. 

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